Definitivamente, conocer la experiencia de otras personas que viven con VIH, nos ayuda a visibilizar cada vez más lo que significa vivir con el virus, logrando que las personas que son diagnosticadas puedan tener mayo facilidad y menos miedo de poder controlar el virus para no llegar a fase SIDA, asimismo permitiendo que los casos indetectables suban y por ende disminuya así la transmisión. Esta vez hable con Francisco, limeño de 30 años, aquí va su historia.
1.- ¿Cómo te diagnosticaron VIH, fue por examen de rutina o hubo algo en especial?
Fue un día de enero al inicio del año del caballo. Había tenido un encuentro sexual riesgoso y, a los días, descubrí que tenía unas llagas alrededor del ano. Me asusté y busqué información. Tuve hartas sospechas de que fuera sifilis. El detalle era que, en todas las webs donde se daba información sobre la enfermedad, también decía que solía venir con VIH. Tuve tiempo para asimilarlo hasta que, a los pocos días, me hice ambas pruebas en Epicentro y ambas salieron positivas.
2.- ¿Estabas informado de lo que tener esa condición conlleva? una vez que sabias todo tu manera de afrontar esa condición cambio?
No estaba informado exactamente de los beneficios del tratamiento, pero sí tenía un elemento esperanzador: un conocido artista de la farándula es VIH positivo desde hace años, lleva un tratamiento y hace su vida normal. Saber eso me dio calma. Lo tomé como una diabetes: incurable pero sobrellevable.
3.- ¿Ahora que ya estas en tratamiento buen tiempo, sientes que es algo que te condiciona a ciertas cosas?
Lo único que siento que me condiciona es llevar mi medicamento por si tengo que salir de viaje o paso la noche fuera de casa. Al inicio a veces me olvidaba llevarlo y me preocupaba. Tomarlo era lo primero que hacía inmediatamente llegaba a casa. Felizmente nunca he dejado mi condición de indetectable.
4.- ¿Qué le recomiendas a todo aquel que tiene sospecha de tener pero tiene miedo de hacerse la prueba
Qué se la hagan. Es mejor saber por el bien de uno, por el de tus seres queridos y por el bien de tus compañeros sexuales. Que lo tomen como una situación crónica que no les va a impedir nada en sus vidas.
Mi Vida con VIH 
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